5/13/2009

Llegaste angustiado: "Raquel, los niños han crecido, y le han dicho a su hermano menor que los Reyes Magos no existen....."

Carta para los tres hijos de ese gran amigo mío. Para todos los niños del mundo que terminan por crecer. 

                                  En algún momento, en algún lugar del mundo.

Para Diego, Mauro y Emilio:

Hace algunos días supimos que varios niños en el mundo, haciéndose un poco adultos, quisieron creer que la magia no existía. Y la palabra importante aquí no es la magia en realidad, es creer. Se cree en algo o en alguien, cuando se es un niño, porque el corazón se tiene intacto, lleno de esa esencia que sólo Dios comprende, esa esencia que los magos llamamos amor.

Cuando los niños crecen en edad, el corazón va dividiéndose, y se va partiendo en todas esas cosas superficiales por la que los adultos viven (El tengo que…. El debo que…. El dinero…. Las cosas materiales…. Quedar bien…. ) Además que sólo dan valor a lo que con los sentidos pueden percibir,  es así como pierden la capacidad de creer en todo lo que no pueden comprobar y dejan atrás esos mundos llenos de magia en los que los niños viven y viven felices.  Hacerse grande como Diego o como papá o mamá, no quiere decir que tengan que perder la capacidad de creer por el simple hecho de ser mayores, al contrario; Debemos estar pendientes siempre de mantener su sonrisa como la que ahora tienen, de mantener la fe como la que ahora tienen, debemos creer que hay una fuerza mayor que todo lo puede y que todo consigue, esa fuerza donde la magia sustenta sus conocimientos: El amor.

Los regalos que cada año reciben los niños, no son mas que muestras de amor y agradecimiento a la vida por su existencia, año tras año, cada niño que fue creado con amor recibe regalos para que sepan que son importantes no sólo para sus padres, amigos o hermanos; si no para el mundo entero. Tú Mauro y Emilio, son niños que si siguen creyendo en que la confianza en el amor mueve todo lo incomprensible, podrán sin duda llegar hasta donde quieran llegar. Y de eso se trata  esta vida, de ser  todo, lo que has nacido para ser.

Con un cariño grande,

Los magos de oriente

 

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